Un aborto es la pérdida del bebé hasta la semana 20 de gestación, y entre un 50-75% de los abortos naturales ocurren durante las dos primeras semanas de gestación, y el 75% durante el primer trimestre de embarazo. Sin embargo, hay un 80% de probabilidades de que el siguiente embarazo llegue a término. Esto no son más que cifras, pero nos dan una ligera idea de la cantidad de mujeres que han pasado por esto, seguro que conoces a alguien que ha sufrido un aborto, o quizás tu misma has pasado por ello, y a veces no sabemos qué decir y metemos la pata porque nadie nos ha explicado cómo dirigirse a una mujer que ha sufrido un aborto (aunque tampoco nos explican cómo hablar con alguien que ha perdido a cualquier otro familiar y no la pifiamos tanto…).
Cómo dirigirse a una mujer que ha sufrido un aborto
No banalices. Empatiza.
Jamás de los jamases le digas que si lo ha perdido es porque algo no iba bien y su propio cuerpo lo ha rechazado. Muchos abortos suceden porque hay algún problema, alguna malformación, algo que hace que ese embrión sea incompatible con la vida y no siga adelante. Pero eso a la madre le da igual, ella iba a tener un bebé, se había hecho ilusiones e imaginado un futuro, y que tu le digas eso no hace más que hundirla en su lamento.
No le quites importancia a lo que le ha pasado, y menos si ha tenido que someterse a un Tratamiento de Reproducción Asistida, tenía vida creciendo en su interior y ahora ya no. Se siente vacía, incomprendida y desolada. Lo que le ha pasado es importante para ella, que lo sea también para ti, y si no lo es mejor no le digas nada.
Comprende su situación. Escúchala.
No le digas que lo olvide y siga para adelante, que mire al futuro, que a la próxima lo conseguirá y que no pasa nada. Sí que pasa, porque su futuro iba a ser junto a ese bebé, y a ESE bebé no lo tendrá JAMÁS en brazos. Lo ha perdido, es irreemplazable por mucho que se quede embarazada de nuevo. Durante unas semanas o durante unos días ha querido a su bebé, ha sido parte de su vida, y siempre lo va a ser.
Si es joven, no se lo recuerdes, eso no es un motivo por el que debería borrar de su vida lo que le ha pasado. Podrá tener más hijos, tiene tiempo de crear una familia numerosa, pero serán OTROS hijos, y el que ha perdido no volverá.
No minimices su problema. No relativices.
Evita por encima de todo decirle que mejor cuanto antes, que mejor estando de pocas semanas, que hubiera sido peor abortar estando de 20 semanas. ¿Podría haber sido peor? Sí. Pero de cuatro semanas, de diez, o de las que sean, también le duele.
“Mal de muchos, consuelo de tontos”, pero ella no es tonta, necesita su tiempo. No le expliques otros casos, lo está pasando mal y lo último que necesita es saber que conoces a alguien que conoce a alguien que perdió a su bebé nada más nacer, o estando de ocho meses, o cómo sea.
Déjala llorar. Respeta su duelo. Ten paciencia con ella.
No sólo es el aborto, son las emociones depositadas en ese embarazo, las ilusiones que tenía, el futuro que había imaginado… No sólo pierde un hijo, pierde una vida junto a él.
Respétala.
Si tu también has pasado por un aborto, te recomiendo el foro de Superando Un Aborto.
Qué duro es hablar de este tema… pero qué necesario! Escuchar, no minimizar, respetar el duelo… No lo hubiera dicho mejor. Mil gracias por tu post
Es muy duro pero muy necesario sí ?
Lo has explicado muy bien. Yo he pasado por tres abortos en las primeras semanas de gestación, el más avanzado el primero a las casi 9 semanas. Y todas y cada una de las frases de “consulo” que mencionas me las han dicho y me han dolido. Sabes que te las dicen intentando ayudarte a superarlo, pero realmente son frases muy desafortunadas que sólo hacen que te sientas más sola e incomprendida de lo que ya te sientes. Parece que nadie salvo tú comprenda que ese bebé que estaba creciendo dentro de ti era tu hijo a pesar de no tener todavía forma humana y que le querías a él, no a ningún otro que pueda llegar después. Él se ha ido y jamás llegarás a conocerle, a ver su carita, a abrazarle. Esa vida era única y era tuya, con ella se va un pedacito de ti, pero parece que nadie se da cuenta…
Gracias Claudia ? Siento mucho tus pérdidas, ya lo sabes, ¿cómo vas ahora?
Pues ahora estoy con inseminaciones en la SS. En principio, nosotros pensábamos empezar con FIV y en marzo fuimos a informarnos a la parte privada de nuestro hospital público (el mismo equipo médico y las mismas instalaciones funcionan tanto de manera pública como privada) y nos ofrecieron la posibilidad de probar unas cuantas inseminaciones antes de pasar a FIV pagando, ya que, al no saber la causa de los abortos, la FIV no nos ofrece ningún tipo de garantía y puede que la hagamos para nada… Total, que en abril hice un intento que resultó negativo y ahora estoy en pleno proceso de estimulación para el segundo (en este hospital las hacen en meses alternos…).
Es verdad, era en el Sant Pau ¿no? ¿Las pruebas por abortos de repetición no te las han hecho? Mucha suerte en esta segunda IA ??
Muy bien explicado, he pasado por tres abortos y el último decidimos no hacer público el embarazo por si volvía a pasar no tener que volver a vivir situaciones como las que cuentas, lo volví a perder y por lo menos el duelo lo pasamos en silencio, solo nosotros.
Gracias guapa, lo más habitual es hacer como tu y optar por la prudencia… ¡Un abrazo!
Yo soy de las que ha sufrido un aborto y creo que es muy necesario hablar de este tema. Al igual que tu, también recomiendo el foro: superando un aborto y en facebook existe un grupo llamado duelo gestacional y perinatal que también dirige Mónica y que mantiene la idea del foro. A mí también me fue especialmente bien el libro: “La cuna vacia” ya que me hizo entender bastantes cosas de lo que me pasaba.
Creo que lo de no saber como actuar ante este hecho viene de la época en que las mujeres solo servíamos para tener hijos y cuidar de la casa así que si perdías un hijo, mejor callatelo y sigue adelante. Por suerte las cosas cambian y cada vez somos más las que alzamos la voz y decimos con la cabeza erguida que hemos sufrido una pérdida, que nos entristece y que nunca la olvidaremos y, también por suerte, cada vez son más las personas que nos comprenden, que nos permiten vivir nuestro dolor y nos apoyan en él.
Es un tabú pero efectivamente es muy necesario alzar la voz y no pasar por esto solas, porque no estamos solas. ¡Ánimos!